Autoridades y expertos en educación de América Latina y el Caribe se reunieron en Colombia para analizar las problemáticas actuales del sector y trazar una hoja de ruta que permita garantizar la recuperación de aprendizajes básicos de los niños, niñas y adolescentes de la región.
En el Encuentro regional ‘Un compromiso de acción por la Educación’, consideran en aunar esfuerzos para hacerle frente a los rezagos de aprendizaje ocasionados por el Covid-19.
Según datos del Banco Mundial, debido a la pandemia los niños, niñas y adolescentes han perdido en promedio 1,5 años de aprendizaje y pueden haber retrocedido hasta 10 años debido al cierre de las escuelas.
“Tenemos un gran reto que nos une como región y es trazar una hoja de ruta que nos permita afrontar la crisis de aprendizaje ocasionada por la pandemia, y establecer metas comunes que incorporen enfoques pedagógicos y programas para el fortalecimiento, aceleración y recuperación de los aprendizajes básicos de nuestros niños y niñas, incorporando las competencias socioemocionales y los temas de salud mental como una prioridad”, afirmó la ministra de Educación de Colombia, Aurora Vergara Figueroa.
Las evidencias preliminares de varios países de la región muestran que las mayores pérdidas en los aprendizajes se encuentran en los grados de básica primaria y entre estudiantes de los niveles socioeconómicos más bajos.
En el informe ‘Dos años después: salvando una generación’, del Banco Mundial, UNICEF y UNESCO (2022), se reconoce que, de no lograr garantizar estos aprendizajes fundamentales, una generación entera no estará capacitada con las habilidades primordiales en lectoescritura y matemáticas. Esto se verá reflejado directamente en la falta de empleo para los jóvenes y en una mayor brecha socioeconómica. Se calcula que la población juvenil podría perder hasta el 12% de sus ingresos futuros representando a nivel colectivo una pérdida de hasta USD 2,3 billones. El último informe sobre capital humano publicado por el Banco también resalta que, debido a la pandemia, los niños en edad preescolar de varios países han perdido más de 34 % del aprendizaje en lengua y alfabetización tempranas y más de 29 % del aprendizaje en matemáticas, en comparación con las cohortes anteriores a la pandemia.
“Las pérdidas de aprendizaje son tan grandes que muchos niños y niñas corren el riesgo de abandonar la escuela. Debemos poner en marcha acciones inmediatas para atender a las poblaciones más vulnerables. Nuestro compromiso desde el sector educativo es evitar que se amplíen las brechas sociales y la inequidad en nuestra región”, agregó la ministra de Educación de Colombia.
De acuerdo con UNICEF, las pérdidas colectivas de aprendizaje pueden perjudicar a América Latina y el Caribe en el futuro, exacerbando las desigualdades y poniendo en peligro el crecimiento económico. Para enfrentar este enorme reto, Colombia está liderando y convocando a los países de la región a unirse a través de un ´Compromiso de acción por la educación´.
Este compromiso para la acción sobre los aprendizajes básicos es un mecanismo oficial impulsado a nivel global por el Banco Mundial, UNICEF, UNESCO, USAID, el Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Mancomunidad de Naciones del Reino Unido (FCDO), y la Fundación Bill y Melinda Gates, y más recientemente, en América Latina y el Caribe, por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Diálogo Interamericano y la Secretaría de Educación de Bogotá. Su propósito es lograr que los gobiernos y la comunidad educativa implementen acciones para garantizar, al más alto nivel político, que todos los niños y niñas del mundo logren adquirir los aprendizajes básicos, y complementa un compromiso regional que se lanzó el año pasado para proteger y recuperar el aprendizaje.