Un hecho preocupante envuelve a la Selección Colombia en la previa de su enfrentamiento contra Bolivia, tras la grave denuncia de espionaje presuntamente realizado durante su entrenamiento en Cochabamba.
El técnico Néstor Lorenzo confirmó que el equipo fue monitoreado desde un edificio cercano durante una sesión privada de prácticas, lo que obligó al cuerpo técnico a realizar cambios en la alineación y estrategias para evitar que los planes fueran descubiertos. El DT de Bolivia, Óscar Villegas, había insinuado en una entrevista previa su deseo de obtener información sobre el equipo colombiano, aumentando la tensión en torno a este tema.
Lorenzo expresó su malestar por la ruptura de la privacidad del plantel, declarando que ya han identificado a las personas responsables y que presentarán una denuncia formal. “Es lamentable que te manden a espiar. No sé de dónde salió o quién era, pero lo identificamos. Tenemos fotos y veremos cómo procedemos en estas horas”, dijo el entrenador en rueda de prensa.
La situación ha generado gran preocupación antes del partido, y de comprobarse el espionaje, Bolivia podría enfrentar duras sanciones por parte de la Conmebol o FIFA. El caso recuerda situaciones similares en el fútbol internacional, como lo ocurrido en los Juegos Olímpicos, cuando la entrenadora de Canadá fue suspendida por un año tras espiar a sus rivales, lo que llevó a la sanción del equipo canadiense. El ambiente entre Colombia y Bolivia se vuelve cada vez más tenso, poniendo en el centro de la polémica la ética en el fútbol y las repercusiones que este acto podría tener en el futuro.