Así lo sugirió el negociador del Gobierno en la mesa de esos diálogos José Félix Lafaurie, luego de conocerse que presuntamente de los miles de millones desviados de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, algunos de esos dineros pudieron haber financiado proyectos del grupo ilegal en Arauca.
Para Lafaurie, es mejor suspender el proceso de conversaciones hasta cuando la sombra de corrupción en este asunto, el cual, también salpicó a la Representante a la Cámara por las Víctimas, Karen Manrique, se aclare completamente.
“Muy grave que el escándalo de corrupción vincule a Karen Manrique, parlamentaria de Arauca por una de las curules de paz, por el presunto desvío de recursos hacía el ELN, a partir de la gestión interesada de millonarios recursos de la UNGRD, destinación oculta que ha sido denunciada por Olmedo López, el confeso ex director de la Unidad de Gestión del Riesgo”, expresó Lafaurie en una columna.
Recalcó que “gravísimo si, pues se trata de la representante de las víctimas, en una región todavía victimizada por el ELN, y se trata de recursos para un municipio, Saravena, sometido al control territorial de un grupo armado ilegal”.