
Mientras que en Europa todas las bolsas del continente registraron fuertes caídas efecto de los aranceles impuestos por el gobierno de EE.UU. a más de 60 países, el pulso entre China y los norteamericanos, por esos cobros siguió escalando.
Mientras los estadounidenses subieron su recargo al 104% para los productos chinos, estos últimos fijaron un arancel del 84% a las importaciones norteamericanas.
Los cobros para los gringos según las autoridades chinas comenzarán a hacerse efectivos desde este jueves.
Ante la batalla arancelaria con Estados Unidos, el Gobierno chino con su vocero de Relaciones Exteriores, Lin Jian, declaró: «El derecho legítimo al desarrollo del pueblo chino es inalienable, y la soberanía, la seguridad y los intereses de desarrollo de China son inviolables»,
A su juicio, seguirán “tomando medidas firmes y contundentes para salvaguardar nuestros derechos e intereses legítimos».
Ante esa rivalidad impositiva, los expertos consideran que de no haber diálogos se paralizaría el comercio entre dos grandes del mundo y sus consecuencias serían desconocidas hasta ahora.