Carlos Ramón González, director de Inteligencia del país, renunció a su cargo y su dimisión fue aceptada por el Presidente Gustavo Petro, como consecuencia del escándalo de corrupción destapado en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres.
González dejó su cargo horas después que se conociera que supuestamente había ordenado pagar sobornos a los ex presidentes de Senado y Cámara, Iván Name y Andrés Calle, para aprobar proyectos del Gobierno..
Todo ello hecho público en la diligencia imputación de cargos a los confesos directivos responsables del fraude en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Olmedo López y Sneyder Pinilla.
Al aceptar la renuncia de González en el cargo de director de Inteligencia, el Jefe de Estado explicó que ese cargo es incompatible con cualquier investigación judicial.
Según el Mandatario, “lo mejor es la separación de su cargo, para tranquilidad de fiscales y jueces, para su independencia y buen juicio y para la misma labor de defensa de los abogados de Carlos Ramón”.
Con la renuncia de González se cae el primero de los altos Funcionarios protegidos por el Gobierno Petro, relacionados presuntamente, según la Fiscalía con una “empresa criminal”, que defraudó la UNGRD para simular financiación de proyectos con el fin de sobornar congresistas que apoyaran las reformas del Ejecutivo en el Legislativo.
Recordemos que además de González, entre los altos funcionarios y ex funcionarios relacionados en el escándalo de la UNGRD sobresalen, Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, Luis Fernando Velasco, ex ministro del Interior y Sandra Ortíz, ex consejera presidencial para las Regiones, entre otros.
