Las autoridades israelíes y los medios de comunicación de ese país confirmaron que se inició un ataque militar contra Irán, como resultado de las amenazas y tensiones existentes entre las dos naciones, las cuales se agudizaron en las últimas semanas.
Por su parte, desde Teherán se confirman también que hace muy poco tiempo comenzaron a sonar las sirenas de alarma en gran parte del Territorio, así como numerosas explosiones en distintos sectores de la ciudad.
Israel Katz, ministro de Defensa israelita horas antes había anunciado una situación de extrema emergencia en su Nación y había advertido que solo serían aprobadas las actividades esencialmente básicas en todo el territorio como prevención de la respusa militar que se espera del Gobierno de Irán con drones explosivos y misiles aéreos, entre otras armas.
Las Fuerzas Armadas de Israel ratificaron su ataque a Irán argumentando que se trataba de un ataque preventivo sobre Teherán, la capital iraní, por lo que se declaró el estado de emergencia en suelo israelita.
